

Uno de los avances más significativos es la incorporación formal del cepo como herramienta de retención en los autos. El decreto habilita su aplicación cuando no resulte posible trasladar un vehículo por falta de grúa, falta de espacio en el galpón municipal o por condiciones mecánicas que impidan moverlo. Por ejemplo casos donde el conductor deja el auto inmovilizado deliberadamente: freno de mano trabado, caja automática en “parking”, ruedas dirigidas contra el cordón o ubicaciones que impiden el acceso de la grúa o del tráiler. En cualquiera de estos escenarios, podrá colocarse el cepo hasta que el juez disponga la liberación. La normativa incluso incorpora un apartado específico para vehículos de gran porte, aclarando que cuando su traslado sea materialmente imposible, se utilizará el sistema de bloqueo de ruedas. FUENTE RN
















