
En una ceremonia austera y con más de 200.000 fieles: el mundo despidió al papa Francisco
INTERNACIONAL

El funeral del papa Francisco se celebró este sábado en el Vaticano. Fue enterrado en Santa María la Mayor, según su voluntad, en una ceremonia austera.
Luego de un multitudinario funeral en la plaza San Pedro y tras un recorrido por el centro de Roma, el papa Francisco fue sepultado en la basílica de Santa María la Mayor, lugar que él mismo eligió, ya que era devoto de la Virgen María. Se convierte así en el primer papa, desde León XIII (que murió en 1903), en ser enterrado fuera del Vaticano. Según sus deseos, su tumba esta en el suelo, sencilla, y solo cuenta con la inscripción “Franciscus”, su nombre en latín.
Francisco quería un funeral sencillo y cambió varios puntos en el protocolo. Para este sábado, el papa pidió que hubiese poca decoración y que no hubiese pantallas, “no quería que su funeral fuese un espectáculo”. Asimismo, encomendó que la misa fuese breve y que no lo despidieran “como un monarca, el vicario de Cristo o el sucesor de Pedro, sino como un pastor más”, y dejó claro que debían referirse él como papa u obispo de Roma, en vez de sumo pontífice.
Cuál es el protocolo para los invitados especiales
La delegación fue presidida por la Argentina porque es el país de nacimiento del papa, explicó el periodista y especialista en temas de realeza Rodolfo Vera Calderón. En este caso, el presidente Javier Milei se sentó en primera fila junto a su par italiano, Sergio Mattarella, y la primera ministra, Giorgia Meloni, las autoridades del país donde se encuentra el Estado del Vaticano.
Junto a los mandatarios, se sentaron las casas reales, ya que el papa es el monarca del Vaticano, un país absolutista, electivo y vitalicio.
En las siguientes filas, se sentaron los 10 monarcas, que estuvieron ubicados en orden alfabético francés.
Las primeras filas fueron dedicadas a las Casas reales católicas que anunciaron su presencia: Felipe VI y Letizia de España. Felipe y Matilde de Bélgica, el Gran Duque Enrique y la Gran Duquesa María Teresa de Luxemburgo, los príncipes Alberto y Charlène de Mónaco, y del copríncipe de Andorra, Joan Enric Vives, actual obispo de la Seu de Urgell. Junto a ellos se sentará el Gran Maestre de la Orden de Malta, frey John T. Dunlap. La gran ausente fue Máxima de Holanda, que además de soberana católica es argentina.
A continuación los reyes no católicos como Carlos Gustavo de Suecia y la Reina Silvia, y el Príncipe Guillermo de Inglaterra.
Después, se ubicaron los 50 jefes de Estado, también por orden alfabético y, por último, las altas personalidades (ministros, viceministros, presidentes de los parlamentos).
Las delegaciones internacionales se sentaron en el lado derecho de la plaza de San Pedro, mientras que en lado izquierdo estarán los cardenales.
(Con información de TN)