

El gobernador había tomado distancia del armado nacional pero la posibilidad de que Rossi sea candidato a vice le da la oportunidad de liderar el peronismo santafesino.
Los planes que viene pergeñando el gobernador Omar Perotti para después del 10 de diciembre, cuando tenga que entregar el poder de la Casa Gris, es el de recluirse en la presidencia de la Cámara de Diputados provincial con el bloque mayoritario compuesto principalmente de sus actuales ministros y funcionarios de segundas líneas y desde allí, intentar volver a la gobernación en cuatro años.
Para ello, deberá ganar en su categoría, una carrera con obstáculos debido a la caída en la imagen de gestión que, como adelantó LPO, supera el 70 por ciento de rechazo y lo obliga a hacer una campaña intensa que permita revertir esos guarismos. De hecho, el gobernador llevó las negociaciones del armado de listas provinciales al límite porque no quería ceder lugares al candidato a gobernador Marcelo Lewandowski.
Al punto tal que el peronismo santafesino llevará cuatro precandidatos a gobernadores a las PASO, y entre las distintas tribus repetían que lo único que atendía el gobernador era a su categoría y que el resto lo dejó librado a las negociaciones sectoriales. Vale recordar que en la provincia se vota con boleta única y cada categoría se elige por separado lo cual obliga a diseñar campañas segmentadas al no haber efecto arrastre que permite la lista sábana.
El rumor de la candidatura del jefe de Gabinete, Agustín Rossi, como vice de Scioli, puso a Perotti en alerta ante la amenaza de que la fórmula se formalice y Rossi tenga una nueva oportunidad de hacerse con el destino del peronismo provincial y ponga en jaque los planes del gobernador
Del mismo modo, Perotti tampoco se metió en la discusión por las candidaturas nacionales y cuando sus pares se reunieron en el CFI para llevar a la mesa una postura uniforme, el santafesino se aisló en la muestra rural Agroactiva.
Sin embargo, el rumor de la candidatura del jefe de Gabinete, Agustín Rossi, como vice de Scioli, puso a Perotti en alerta ante la amenaza de que la fórmula se formalice y Rossi tenga una nueva oportunidad de hacerse con el destino del peronismo provincial y ponga en jaque los planes del gobernador. Se sabe que Rossi difícilmente desaproveche una ocasión semejante.
De hecho, en el rossismo se molestaron con la nota de La Política Online que adelantó que el jefe de Gabinete picaba en punta entre las opciones para acompañar a Daniel Scioli porque implicaría declinar su propia postulación presidencial. También se sabe que Rossi no acata órdenes fácilmente. En las elecciones intermedias pasadas, ni Cristina Kirchner lo pudo convencer de que baje su lista a senador y le allane el camino a Lewandowski quien le tuvo que ganar en las primarias.
Ahora, con la posibilidad de que Rossi termine como candidato a vice de Scioli obligó a Perotti a poner mayor atención a lo que pase en las próximas horas con el armado de la lista a diputados nacionales para no quedar al margen de Unidos por la Patria.
Es que las opciones que se barajan en Santa Fe para la o las listas de diputados son tan variadas como los escenarios posibles de fórmula presidencial donde el peronismo aspira a revalidar tres bancas de la Cámara Baja que se definirán entre el massismo, el kirchnerismo, el rossismo que si su líder va de vice de Scioli, se sumaría a la mesa Omar Perotti.
Si hay PASO, la alianza entre Cristina y Massa llevarían al ministro de Transporte Diego Giuliano por el Frente Renovador mientras que Florencia Carigniano y Marilín Sacnún son las dos posibles candidatas de la vicepresidenta y Camilo Scaglia, funcionario de Desarrollo Social, sería el hombre de Perotti en ese armado.
La posibilidad de que Rossi termine como candidato a vice de Scioli obligó a Perotti a poner mayor atención a lo que pase en las próximas horas con el armado de la lista a diputados nacionales para no quedar al margen de Unidos por la Patria
En la vereda opuesta, Rossi impulsa la reelección de Germán Martínez, presidente del bloque del Frente de Todos en Diputados, y se verá qué termina armando Scioli en el territorio que por ahora no pudo mostrar acuerdos de peso tampoco en Santa Fe.
En caso de que no haya PASO, el tema se complica aún más. Entre los renovadores sostienen que Sergio Massa va a garantizar el primero o segundo lugar para su ministro Giuliano y en el kirchnerismo apuntan a Carigniano. A su vez, el trabajo de Germán Martínez en el bloque le permitió cosechar el apoyo no solo del rossismo sino también del resto del peronismo local.
En consecuencia, el candidato de Perotti es el que queda más comprometido. Si se da ese escenario, el gobernador deberá promover a una mujer por el requisito de paridad y con pocas posibilidades de ser electa. "Es la única manera de comprometer a Perotti en la campaña", reflexionó en diálogo con LPO un peronista alejado del gobernador. Como sea, el misterio se terminará develando en las próximas 48 horas.
LA POLITICA ONLINE