

El ultramaratonista rafaelino culminó el domingo pasado su travesía de 800 kilómetros en nueve días por Rafaela y localidades del Departamento Castellanos, que también tuvo un costado solidario.
Agustín Pecantet sigue recibiendo muestras de afecto y reconocimiento luego de concretar su anhelado Desafío de recorrer 800 kilómetros en nueve días. La inmensa satisfacción personal vino de la mano también con algún kilo menos y un color de piel más de enero que de este invierno, pero natural después de tantas horas al sol en estos días.
«Estoy contento, feliz, ya descansado aunque duelen un poquito las piernas, y cayendo un poco de todo lo que vivi», contó en la introducción el ultramaratonista que batió un record que espera sea homologado cuando se cumplan todos los procesos administrativos.
El costado solidario que persiguió este notable esfuerzo, para apoyar a familias de bajos recursos que acompañan a sus seres queridos internados en el Hospital de niños Dr. Orlando Alassia de Santa Fe, también significó un impulso extra. «Estuve hablando con gente del Hospital, están muy contentos. Estamos esperando tener el detalle de lo que se recaudó, la idea es hacer una devolución viajando a Santa Fe para estar con ellos».
Consultado sobre si la planificación realizada en lo previo pudo cumplirse como lo esperaba, mencionó que «sí, se planteó una escala asi de dos días de 50 km y 7 días de 100, sabía que desde el segundo o tercer día iba a haber incertidumbre porque era algo que nunca había hecho. Pero me sentí muy bien, un solo día como todos saben que decidí parar porque no podía comer, pero en todo momento el cuerpo reaccionó bien con los pocos descansos que hubo».
Un aspecto para remarcar fue el acompañamiento que tuvo durante todos los días (el domingo fue el último), indispensable para tener el apoyo en momentos que la fatiga empieza a sentirse. «Creo que día a día iba aumentando la cantidad, en los primeros tuvimos 60-70 personas y el ultimo día mucha gente corriendo, en bici, en auto, no fui consciente de eso. Estoy muy contento, y le agradezco a esa gente que se movilizó dijo el Profe de Guepard Entrenamiento.
En cuanto a cómo manejó el tema de la alimentación en el Desafío, respondió que «cada 10-12 kilómetros trataba de parar, la nutricionista me había hecho una planificación de lo que podía comer, pero eran 12 o 15 ingestas mas o menos diarias, y luego poder comer lo que mas podía a la noche, inclusive me ponía alarmas para comer a la madrugada para llegar a cubrir los requerimientos».
En su recorrido por casi todo el Departamento Castellanos, Pecantet recibió muchas muestras de afecto que valoró. «La verdad que muy contento, eran pocas las localidades que me había contactado, el resto se fueron sumando. En Humberto vino un chico no vidente (Hugo Acuña) a correr conmigo, luego hablando con él había corrido en varias carreras en Formosa, en Zárate, Olavarría, y eso fue muy emocionante. Lo mismo con la gente que se sumó a compartir un sandwich».
Y lo dejamos seguir disfrutando de esta linda realidad. «Es un logro de muchos años de preparación, que siempre venía soñando».
Con información de Revista Todo a Pulmón Rafaela.