
Marcelo Lewandowski: "Puede llegar a haber tres listas distintas del peronismo en Santa Fe"
NACIONALES

El senador nacional dijo que el PJ santafesino no muestra las reformas necesarias para ser una "fuerza competitiva" y advirtió sobre un panorama de "disgregación y falta de conducción" en el partido.
Marcelo Lewandowski, senador nacional por Santa Fe del bloque Frente Nacional y Popular, dijo que el peronismo podría presentarse en su provincia con “tres listas distintas” ante la falta de “unidad lógica” del PJ a nivel provincial y nacional. “Hoy hay una gran desesperanza de aquellos que no quieren a Javier Milei para encontrar algún referente que los identifique”, sostuvo en Modo Fontevecchia, por Net TV, Radio Perfil (AM 1190) y Radio JAI (FM 96.3).
Marcelo Lewandowski es senador nacional por Santa Fe en el bloque Frente Nacional y Popular. También es convencional constituyente de su provincia. En 2023 había sido candidato a gobernador en Santa Fe por el Frente de Todos. Su carrera política comenzó en 2019, cuando fue electo senador provincial por el departamento Rosario. Antes ejerció el periodismo deportivo durante más de 30 años en medios como LT8, LT3 y Canal 5.
Hablábamos con un equivalente suyo de Salta y le pedíamos que nos tradujera a los porteños qué es el peronismo salteño. En el caso de Santa Fe, Omar Perotti judicializó el proceso de cierre de listas. ¿Podrá ir el peronismo unido? ¿Qué diferencias hay?
Es difícil de explicar, pero vamos a sintetizarlo. Cuando se reconfiguró el PJ en Santa Fe, allá por fines del 2023 y principios de 2024, nosotros expresamos nuestro descontento por cómo se había manejado todo. Están representados casi todos los sectores del peronismo, como el sector del exgobernador Omar Perotti, el Movimiento Evita, La Cámpora y los senadores de la provincia de Santa Fe, que tienen un peso propio, que no responden a ninguna organización, pero sí han tenido un peso a partir de la conducción de Armando Traferri. También aparecieron grupos de intendentes reunidos para participar. Nosotros, a lo largo de todo ese año, entendimos que el peronismo no estaba mostrando las reformas y las modificaciones que se necesitaban para volver a ser una fuerza competitiva. A principios del 2025, decidimos ir por fuera del sello PJ en las elecciones a constituyente. El peronismo puso a un extrapartidario a comandar, que es Juan Monteverde, de Ciudad Futura.
Hoy puede llegar a haber tres listas distintas del peronismo en Santa Fe, al no haber PASO. Puede ser que Perotti lleve a la cabeza a Roberto Mirabella, que el oficialismo proponga a Agustín Rossi como candidato, y que el Movimiento Evita, junto con Ciudad Futura, propongan a Eduardo Toniolli, que tiene que renovar su banca como candidato. A nivel nacional ya les dije que si no hay un ordenamiento y una posibilidad de unidad lógica, cierta y concreta a partir del ordenamiento que dan los votos, es muy difícil que el peronismo no tenga tres listas en Santa Fe, lo que sería realmente muy difícil para sostener las tres bancas que tiene que sostener y que le brinda hoy al Congreso Nacional. El panorama es de disgregación y de no conducción.
La emergencia de Provincias Unidas con cinco gobernadores, incluyendo el de Santa Fe, nos hizo reflexionar, desde nuestro “porteñocentrismo”, sobre un grito del interior, cansado del “ambacentrismo”. Vemos que no hay muchas diferencias entre los gobernadores peronistas y los gobernadores radicales. En el conurbano sí hay un peronismo distinto, pero al interior de la provincia de Buenos Aires o en las provincias, hay un peronismo más de centro y un radicalismo más de poder porque es territorial, donde las obligaciones de gobernar lo llevan a cada uno a responsabilidad fiscal. Se puede plantear que, frente a la emergencia de Milei y la fuerza arrolladora de La Libertad Avanza, pueda pasar lo que pasó en Europa. Es decir, que el radicalismo y el peronismo se terminen juntando. ¿Encuentra en ese tronco común del radicalismo fin del siglo XIX, el peronismo mediado del siglo XX, la posibilidad de una fusión, y que el interior sea el crisol que junte eso en una especie de alianza, como fue en el caso de Lula anti-Bolsonaro, en el caso de Argentina en 2027 anti-Milei?
Los senadores hicimos una recorrida por provincias llevando y mostrando la problemática y la mirada productiva que, si no se recorre cada una de las provincias, no se tiene. Incluso Santa Fe, de donde provengo, es una provincia multicultural, en torno a que puede haber dos o tres provincias conviviendo por tradición, por cultura, por historia, por descendencias. Entonces, no es algo monolítico que se pueda pensar de la misma manera.
Hay una resignación a un interior que, en su mayoría, son lugares que producen muchísima riqueza y no tienen agua potable, o no tienen cloacas, o no tienen el servicio de gas. Todo eso se viene postergando a lo largo de años, y toda esa instancia también ha propiciado el fortalecimiento de los conurbanos, en donde la gente, aunque sea con una changa, tiene de qué vivir y se va corriendo de esos lugares. En el país ha ido ganando la migración interna, producto del desaliento de quedarse en las localidades en donde uno ha nacido y ha crecido. Esa es una mirada.
Después, me parece que el movimiento de los gobernadores es un dique de contención de quienes están gobernando y quieren tener su propia representación y no que se los lleven como ovejitas en cada una de las votaciones. Tener un poder de confrontación con el Gobierno me parece que también es otra mirada. Ojalá aparezca otra mirada y entendamos que hay problemas comunes y problemas en los que, más allá de la dialéctica tenemos que resolver los problemas cotidianos. Hay dificultades en las provincias y un modelo productivo que este Gobierno está avasallando. Por eso, tener una mirada productiva del interior es muy importante.
Ahora bien, considero que deben existir algunas medidas y un lineamiento programático. Cuando escucho que dicen que el déficit fiscal es “la meta”, pienso que el equilibrio en las cuentas es importante, pero cuando hay personas sufriendo, gente a la que no se le paga la discapacidad, que no tiene para comer, o jubilados que no pueden comprar remedios, mi prioridad debe ser atender esas necesidades, no solo enorgullecerme de que mi Excel marque cero.
Por ejemplo, veo cómo el gobernador (Maximiliano) Pullaro se reúne con (Daniel) Scioli. Tengo un buen diálogo con Pullaro, pero no comparto su forma de hacer creer a la población que el empleado público es el “mal del momento” o que haberle votado leyes importantes a (Javier) Milei, como la Ley Bases era una buena salida. Coincido en que debe haber una mirada productiva del interior y en cambiar la perspectiva que hay en Argentina.
Ahora, la producción debe ser objetivo, meta y posibilidad de desarrollo para todo el país. Pero debe existir una sintonía más fina para pensar en algo perdurable. Porque si no, nos quedaremos solo en hechos concretos. ¿Cuál es el hecho concreto que hoy tienen estos gobernadores? Si tienen una amalgama de diputados y senadores, por lo menos para gobernar los próximos dos años, van a poder discutir desde otra mirada, desde otro lugar, y negociar otras cosas. Si queremos dar un paso mayor, eso va a requerir de una mirada mucho más amplia y profunda.
Quiero nuevamente aprovechar la posibilidad de que usted nos pueda hacer una especie de traducción a lo que podría representar Juan Grabois en la provincia de Buenos Aires, comparando con lo que su discípulo representó en Santa Fe. ¿Cree usted que una persona como Milei termina generando, ampliando las posibilidades electorales de sectores ideológicos como el que representa Grabois?
Hoy hay una gran desesperanza de aquellos que no quieren a Milei para encontrar algún referente que los identifique para saber cómo salimos. Uno se pregunta qué hay enfrente, con quién va de la mano. Y en esa diáspora, hay un sector que claramente encuentra en un dirigente combativo, en un dirigente que va a los barrios, que va a los lugares populares, al conurbano, a los sectores más postergados de ese segmento, y tiene penetración, y muestra un discurso. Indudablemente que la acción electoral de Juan Grabois cuando disputó la interna con Sergio Massa no fue menor.
Hoy hay sectores, sobre todo en las grandes poblaciones, que se sienten representados por ese discurso. Además, ante la orfandad de liderazgos, ¿qué tenemos a mano? Alguno irá con uno, otro irá con los gobernadores, otro irá con Grabois, otro con (Axel) Kicillof, otro seguirá apostando a La Cámpora, otro buscará la alternativa que hay en Buenos Aires con (Facundo) Manes y (Florencio) Randazzo y todo ese grupo de radicales, peronistas y otros partidos. No hay un aglutinador aquí, esa es la realidad. En Buenos Aires fue (Leandro) Santoro, un no peronista pero que, adhiriendo a un discurso y a una claridad en sus conceptos, sumó votos. Pero, en realidad, el argentino está acostumbrado a liderazgos.
El último liderazgo que ha tenido el peronismo es Cristina Kirchner, que en este caso no puede ser candidata, y está en esa disputa sin entender muchas veces cómo llegamos a convencer a un segmento que va de 35 a 40 años para abajo, que mira otra cosa y que ha absorbido otra cultura y otra mirada de la vida. Y hay que entenderla. Perón representó a la República Argentina y a gran parte de la sociedad en 1943. ¿Qué hizo? Leyó la Argentina que nadie leía, la Argentina que estaba sin ser representada, y la condujo durante todo ese tiempo. Hoy hay una Argentina que no se siente representada.
Por eso, creo que hay muchos de los que fueron a votar a Milei buscando algo distinto que no van a votar. Creo que muchos de los que no van a votar están cansados de todo. Votaron a un Milei que ya se dieron cuenta que no es lo que votaron, y desencantados con eso, van por la vida haciendo lo que pueden, odiando la política y cada una de las representaciones que aparecen. Estamos viviendo un cambio cultural en Argentina que puede salir disparado para cualquier lado. Ojalá sea una disparada ordenada y que no haya un 2001, que no haya un agotamiento que termine en hechos de violencia. Pero se están viviendo momentos muy difíciles porque desde la clase dirigente no damos respuesta y la gente la está pasando muy mal.
FUENTE: PERFIL