Para evitar nuevos derrumbes, comenzarán a trabajar en la Recova Ripamonti

RAFAELA..
e_1718230873

María Emilia Vidal, junto a Germán Bottero, mantuvieron este miércoles con los concejales una breve reunión que tuvo como objetivo informarles las acciones que se están planificando para resguardar un sector emblemático de la ciudad.
 

Luego de que parte de la estructura de la emblemática Recova Ripamonti se derrumbara el pasado martes 23 de abril, más allá de las soluciones inmediatas de ese día, desde el Ejecutivo se continuó con el análisis del estado de la construcción y con la programación de labores para estabilizar la estructura restante y prevenir futuros incidentes. Por otro lado, se llevó a cabo un minucioso análisis de los planos de los sótanos y túneles de la obra, con el objetivo de identificar posibles puntos críticos del lugar. Por tal motivo, y si bien aún faltan algunas definiciones, la Subsecretaria de Desarrollo Urbano y Metropolitano tuvo la iniciativa de informar este miércoles al Cuerpo Legislativo todo lo considerado hasta el momento, los planes de acción próximos, y también de propiciar un espacio de diálogo para escuchar las preguntas o propuestas de los ediles.

“En virtud de lo que sucedió, y ante la posibilidad de algún nuevo derrumbe y el peligro que esto implica, teniendo en cuenta también que se trata de un bien protegido, María Emilia Vidal y su equipo estuvieron trabajando para ver qué es lo posible y lo urgente para recuperar fundamentalmente la seguridad”, manifestó Bottero antes de darle lugar a la subsecretaria. Luego de saludar a los presentes, Vidal explicó que el motivo por el cual pidió esta reunión es porque “es un tema que preocupa mucho, hay que tener cuidado con las decisiones que se van tomando, y no se puede perder el tiempo”. Comentó que antes del derrumbe ya se venía analizando la situación de la Recova, mientras mostraba a los ediles imágenes del lugar anteriores y posteriores al suceso que aceleró los tiempos. Luego, informó a los presentes el plan de trabajo trazado, ya que no se trata ahora solo de preservar el patrimonio ciudadano, sino de urgencia antes posibles peligros y derrumbes.

 
En una primera etapa, el trabajo estará enfocado en la demolición del muro sobre calle Belgrano. Es el de mayor riesgo y consta de tres partes: un cerco de lajas, un muro bajo y el muro alto de 8,20 cm (el de mayor peso y el que está cediendo hacia afuera). En una segunda etapa, más adelante, se prevé trabajar en la desvinculación de la estructura de la ex mercería con la fachada sobre calle 9 de Julio para que no sea arrastrada ante algún colapso. Tarea más complicada que demandará también mayores costos.

La funcionaria indicó que en estos momentos se están considerando los recursos, qué se puede hacer y qué no. “Con la Comisión de Patrimonio estamos en contacto desde el día del derrumbe. Tuvimos una serie de reuniones y me queda una conversación con ellos para comentarles esta línea en la que estamos trabajando”, informó. Asimismo, mostró una imagen de un estudio estructural que llevó adelante el ingeniero especialista en Geotecnia y Estructura Marcos Boidi en el 2003 y en el 2017, en la que se ve claramente el muro de calle Belgrano, el cimiento descalzado (ahora lleno de agua) y el desmoronamiento del sótano. “Ahora tuvimos reuniones seguidas con el ingeniero para considerar la situación actual. Buscamos a alguien que tiene mucho conocimiento en este edificio y cálculos estructurales detallados. Podemos ver cómo fue cediendo el muro sobre calle Belgrano desde el 2003 al 2017. La situación no mejoró, por eso hay que tomar acciones inmediatas”.

La primera etapa se desarrollará en el corto plazo una ver definidas algunas cuestiones y todos los actores que intervendrán en esta tarea, como ser la EPE, Higiene y Seguridad y Aguas. Al momento del derrumbe, la idea es hacer un corte vertical y derrumbar el muro hacia adentro. Otro dato no menor que agregó la funcionaria, es que de los escombros que se generen, serán recuperados y conservados aquellos elementos que tengan un valor histórico, como por ejemplo rejas y ladrillos. “Habrá elementos que podrán servir para el museo, para reutilizar o para mostrar a la sociedad. Se va a limpiar el terreno con ese tipo de cuidados. Y en cada cosa que queramos intervenir se los vamos a consultar porque esto es de todos”, aclaró. Ante la pregunta del concejal Juan Senn en relación a los recursos para afrontar la tarea, la funcionaria informó que se disponen de 5 millones de pesos destinados a casos de emergencia, mencionando la ordenanza que lo establece. “Me interesa la opinión de ustedes, por eso quería compartir todo esto aún habiendo cuestiones por definir. La terea es urgente, pero habrá que tener mucho cuidado, tanto por quien realice el trabajo, como por el edificio que tiene valor histórico”, finalizó, aclarando que el intendente está de acuerdo con este plan de trabajo presentado.

CON LA PRENSA

Una vez concluida la reunión, ambos funcionarios se acercaron a los medios presentes y contestaron algunos interrogantes. “Vinimos con Emilia Vidal para brindar un detalle fotográfico de la situación actual del lugar. Nos genera preocupación, porque puede haber un derrumbe cuando alguien esté circulando por la zona. Hemos anulado la pasarela que está hace muchos años, pero la gente de todos modos la sigue utilizando. Quisimos contarles a los concejales porque son parte del gobierno de la ciudad y los queremos hacer parte de estas decisiones importantes. Vamos a ir avanzando en temas de seguridad con demoliciones parciales pensadas y avaladas por estudios profesionales para ir reduciendo esta posibilidad de peligro”, les expresó el Secretario de Gobierno.

A continuación, prosiguió Vidal comentando que desde el día del derrumbe la está acompañando el equipo técnico, la gestión actual, y la Comisión de Preservación y Defensa del Patrimonio Urbano sobre las decisiones que se irán tomando. “La idea es ir de a poco para no cometer errores. Este es un primer paso y queríamos hacerlo parte al Concejo", manifestó.

 
En cuanto a plazos, contestó que depende de que se finalicen las cuestiones que tienen que ver con Higiene y Seguridad y con la EPE, pero se está pensando en lo inmediato. Además, llegado el momento, habrá que avisar a los vecinos y comercios de la zona, como así también a los medios. “La idea en esta primera etapa de demolición es trabajar un fin de semana. Ni bien terminemos con las definiciones pendientes, ponemos fecha”, explicó, aclarando que se trata de un trabajo de pocas horas si todo sale bien. En relación de que se trata de un bien protegido, Bottero subrayó: “Legalmente es un bien nuestro, así que tenemos toda la facultad para ingresar y también la responsabilidad, por eso tenemos la urgencia en el trabajo. Más allá de que se trate de un patrimonio histórico, la seguridad está ante todo”. En cuanto al proyecto ganador de refuncionalización del lugar, respondió “que en estos momentos no es viable porque es un edificio público y no tenemos financiamiento para eso”. “Cuando recuperemos la seguridad del lugar, se avanzará con alguna vinculación pública-privada”, indicó.

FUENTE: DIARIO LA OPINION

Te puede interesar
Lo más visto