
Cúneo Libarona ahora no quiere ser ministro de Justicia y prefiere que Milei lo nombre en la Corte
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Si gana, Milei también analiza sumar a Borinsky a la Corte, para aceitar los decretos que necesitaría para gobernar sin el Congreso.
El abogado Mariano Cúneo Libarona quiere que Javier Milei lo proponga como juez de la Corte Suprema si llega a la presidencia.
El penalista suena para el Ministerio de Justicia de un hipotético gobierno libertario, pero su vínculo con los jueces de la Corte Suprema, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz, es malo y cree que esto afectaría su rol en esa cartera. Su nexo con la Corte es Ricardo Lorenzetti, que espera un cambio de aires en el Ejecutivo para reacomodarse en el Máximo Tribunal.
Si llega a la presidencia, Milei se vería urgido de establecer un buen vínculo con la Corte Suprema puesto que, ante la falta de mayorías propias en el Congreso, debería gobernar prácticamente por decreto. Decretos que ante las previsibles impugnaciones judiciales, deberá convalidar -o no- el máximo tribunal.
Si llega a la presidencia, Milei se vería urgido de establecer un buen vínculo con la Corte Suprema puesto que, ante la falta de peso en el Congreso, debería gobernar prácticamente por decreto y ante su previsible impuganción judicial será el máximo tribunal quien defina su validez.
Por eso, Cuneo Libarona se promociona para juez de la Corte, amparado en la deuda del Tribunal de contar con un penalista entre sus miembros, un déficit importante en su actual composición.
Quien acercó inicialmente el nombre de Cuneo a Milei fue el periodista Alejandro Fantino, el "inventor" del candidato libertario. Tanto Milei como Cuneo formaron parte del staff de Fantino en su programa Animales Sueltos. El líder libertario ha reconocido públicamente que le debe gran parte de su proyección política a Fantino.
Fantino también le sugirió a Milei, comentó a LPO un abogado al tanto de las conversaciones, sumar a la Corte al camarista Mariano Borinsky, de Casación.
En el espacio libertario admiten que deben tener buena relación con "los Fernández". Ellos son Javier, el histórico operador de ese fuero, y Sergio, camarista contencioso. Borinsky está vinculado a ellos.
El nexo con ese fuero es clave por la cantidad de decretos que debería sacar Milei para gobernar y que ante su judicialización, primero deberán pasar el filtro de esos juzgados, para luego terminar en la Corte.
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