En otro grave hecho de violencia, un menor de edad ingresó en la noche del último jueves al Hospital J. B. Iturraspe con dos heridas de arma de fuego en sus extremidades, tras haber sido baleado en un sector de Barrio Acapulco, en la localidad santafesina de Josefina
El joven presentaba lesiones en una mano y un pie y, en estas horas, sería intervenido quirúrgicamente.
Hasta el momento, no trascendieron detalles sobre las circunstancias en las que resultó herido más que se dió en contexto de un tiroteo, por lo que se inició una investigación para esclarecer lo sucedido.
Este episodio se suma a la creciente ola de violencia armada en la zona, que en el último mes dejó un saldo de un muerto y al menos 15 heridos de bala.
Frontera y Josefina: entre la violencia y el olvido
La ciudad de Frontera y Barrio Acapulco de Josefina, ubicados en el límite entre Santa Fe y Córdoba, se convirtieron en escenarios recurrentes de hechos violentos. Lejos de ser un caso aislado, estos incidentes reflejan una escalada de violencia que lleva años sin soluciones concretas por parte de los gobiernos locales y provinciales.
El gobernador Maximiliano Pullaro asumió su mandato con la promesa de reforzar la seguridad en la provincia. Sin embargo, en Frontera y sus alrededores, la realidad muestra lo contrario: los tiroteos se intensificaron y la sensación de abandono crece. Por su parte, el intendente de Frontera, Oscar Martínez, también aseguró que brindaría soluciones, pero la situación no mejoró sino que empeoró.
Los vecinos de esta zona no solo deben convivir con la violencia, sino también con la falta de servicios esenciales.
Obras de infraestructura fundamentales como cloacas o gas brillan por su ausencia, y el acceso al agua potable sigue siendo una odisea.
En este contexto, las balaceras se convirtieron en una amenaza diaria, sumando angustia y desesperanza a una comunidad que ve cómo su calidad de vida se deteriora ante la indiferencia de las autoridades.
FUENTE: RADIO ESTACION
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