Este miércoles se presentó la 37ª edición del Festival Folclórico de Guadalupe, que cuenta con el acompañamiento del Gobierno de Santa Fe. La tradicional y solidaria propuesta se concretará desde el 17 al 19 de enero con una variada programación de artistas y gastronomía. Si bien la entrada es libre y gratuita, desde la organización pidieron una colaboración a los asistentes de alimentos no perecederos y pañales.
El Gobierno de la Provincia participó este miércoles de la presentación del 37° Festival Folclórico de Guadalupe, que se desarrollará del 17 al 19 de enero frente a la Basílica en la ciudad de Santa Fe.
Del acto formaron parte la secretaria de Turismo, Marcela Aeberhard; junto al intendente de la ciudad Juan Pablo Poletti; el cura párroco de la Basílica de Guadalupe, padre Odilio Panigo; y Oscar Roa, entre otros miembros de la comisión organizadora.
Cabe señalar que el Festival de Guadalupe cuenta con el auspicio de Lotería de Santa Fe y Santa Fe Provincia. Se caracteriza por su ambiente familiar, donde todos pueden disfrutar sin importar la edad y lo convierte en una celebración tanto de la cultura folclórica como de la fe compartida por los asistentes.
Este año, contará con la participación de grupos musicales como Los 4 de Córdoba, Los Caldenes, Ceibo y La Contra, además de la presencia de varios artistas locales. La entrada será libre y gratuita pero como todos los años se pedirá la colaboración de los asistentes con pañales que serán distribuidos entre el hospital de Niños “Dr. Orlando Alassia” y la sala de neonatología del hospital Iturraspe. Además, alimentos no perecederos que Cáritas distribuirá entre personas que lo necesiten.
Música, danza y turismo
Durante la presentación del evento, Aeberhard resaltó la importancia de los “eventos culturales y las fiestas populares que dan identidad a Santa Fe” y aseguró que el festival “enaltece a la ciudad capital que durante tres días va a ser visitada por gente de la zona y es una gran oportunidad para conocer el potencial que tiene la localidad para recibir el talento de la música y el folclore, combinándolo con la solidaridad y la familia”.
A su vez, Poletti señaló el apoyo del Estado “hacia la organización que hace 37 años da todo para que en cada edición haya más auge y que el festival siga posicionándose a nivel nacional. Por eso incentivamos el turismo en la ciudad, trabajando en equipo con la Provincia para que Santa Fe sea en el verano un lugar de encuentro”.
Solidaridad e inclusión
En esta nueva edición, el evento se centrará en la inclusión de personas con discapacidad, un proyecto que está en pleno desarrollo, cuyo objetivo es mejorar la accesibilidad a la Basílica, con la construcción de un ascensor que se instalará por fuera del edificio, el cual está en proceso de planificación y dependerá en gran parte de la solidaridad para su financiamiento. El proyecto no sólo buscará hacer el acceso más fácil, sino también promover la integración y el apoyo a las familias que enfrentan la realidad de la discapacidad.
En ese sentido, el padre Panigo anunció que este año se lanzará una campaña para juntar fondos para hacer un ascensor que “permita a las personas con discapacidad y adultos mayores acceder al camarín de la Virgen, que actualmente no lo pueden hacer por escalera. Tenemos la autorización de la Municipalidad y del Arzobispado, nos faltan los fondos que iremos juntando”. Finalmente, en relación a la realización del Festival, el cura párroco puso énfasis en la “relación especial que se da entre el público y los artistas” a la vez que remarcó “la solidaridad hacia los que menos tienen. Por eso es un festival de la unidad en este sentido, porque la solidaridad nos acerca y nos hace pensar en el otro para poder ayudarlo. Y es un festival de la familia, por eso cuidamos el horario, para que todos puedan participar sobre todo de los números centrales”.