El exsecretario de Política Económica en el Gobierno de Alberto Fernández afirmó que la actual gestión conseguirá el “reacceso a los mercados” y el crecimiento financiero.
El exsecretario de Política Económica de Alberto Fernández, Gabriel Rubinstein, aseguró que el presidente Javier Milei y el ministro de Economía, Luis Caputo, “están haciendo un gran trabajo y es probable se obtenga un rotundo éxito en meses y trimestres venideros”.
Lo hizo mediante su cuenta de X, donde afirmó que “a pesar de una gran variedad de falacias”, como que es “la peor crisis de la historia, que veníamos de 17,000% de inflación, que había una deuda exuberante en pesos y una deuda externa comercial a punto de estallar”, las políticas implementadas por el gobierno libertario conducirán a tener una inflación “bien baja, hacia el 1% mensual, una brecha cambiaria menor al 20%, el re-acceso a mercados externos y una economía creciendo a ritmo de 5% anual”.
Sin embargo, a pesar de los elogios, Rubinstein consideró que tanto Milei como Caputo “compran riesgos políticos, económicos y financieros”, que pueden llevar “al Gobierno que en su momento pudiera sucederlo” realizar “ajustes económicos” relevantes.
“No tener un amplio consenso aumenta mucho los riesgos de reversibilidad. La última vez que Argentina no tuvo estos riesgos fue en 2007. Gracias a la herencia de una muy buena macro liderada por Lavagna (superávit fiscal primario de 3% PIB, dólar alto, inflación baja, alto crecimiento, etc.), no importaba si ganaba Lavagna, Carrió o Cristina. No había riesgos de reversión macro. Ahora todavía estos riesgos son importantes”, manifestó el ex funcionario, quien subrayó “la imposibilidad de poder dar certeza que el dólar bajo será eterno” trae riesgos “significativos” de aumento en la caída del empleo, así como de acceder a “empleos de menor calidad”.
Rubinstein consideró también que otro de los riesgos importantes a su criterio son los que “pueden crear severas turbulencias cambiarias” debido a que “el dólar percibido en forma mayoritaria como bajo, cualquier shock político o externo” incita a comprar divisas. “Si encima no hubiera dólares en el Banco Central para hacer frente a corridas, éstas pueden adquirir gran magnitud (estemos con o sin cepo, con dólar flotante o fijo)”, reflexionó.
A modo de conclusión, consideró que “casi todo va viento en popa” y que si esta situación trae “éxito económico”, es posible que el presidente “tenga un muy buen resultado electoral en 2025 y chances de ganar en 2027”.
Sin embargo, cerró afirmando que: “Sería conveniente (o en algún momento necesario) que el modelo, pudiera mejorarse suficientemente, para minimizar los riesgos políticos (reversibilidad), económicos (dólar seguramente demasiado bajo), y financieros (mix de dólar bajo y carencia de reservas en BCRA), de modo que la macro quede sostenidamente ordenada”.
FUENTE: BORDER PERIODISMO
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