Riquelme estiró su paternidad ante River: cómo quedaron los mano a mano desde que es dirigente

DEPORTES 21 de abril de 2024 . .
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El presidente de Boca festejó en Córdoba y sigue invicto en los mata-mata con el Millo desde que es directivo.

Desde la vuelta de Juan Román Riquelme, en esta ocasión como dirigente, Boca se enfrentó a River en diversas ocasiones, y en contextos completamente diferentes. Y hay una marcada tendencia desde que el Topo Gigio tomó las tiendas del fútbol xeneize desde 2020 en adelante. Una paternidad como en sus épocas de jugador, cuando la descosió en cada uno de los superclásicos que le tocó jugar.
 
"Pero tenemos que entender que es un partido de fútbol. Es deporte, nada más que deporte. Es competir, competir, competir. 'Tenemos la ilusión de ganar? Claro que sí. ¿De hacer un gran partido? Claro que sí. Pero más importante es que la gente vaya y disfrute. El día lunes ganará uno, cargará al otro, como pasó toda la vida", dijo el viernes en la conferencia de prensa. Y este domingo volvió a festejar.
Fue 3-2 en la Docta. Había arrancado River arriba con gol de Miguel Ángel Borja, pero Boca lo dio vuelta con goles de Miguel Merentiel (dos) y Edinson Cavani. El ex 10 lo siguió desde el palco, siempre con su mate al lado, y festejó con los suyos.

LOS OTROS DOS MATA MATA POR PENALES
El primer mata-mata fue el 16 de mayo de 2021, por los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional. El partido se disputó en la Bombonera, y terminó en empate por 1-1. Con goles de Carlos Tevez y Julián Álvarez, el Xeneize y el Millonario -disminuido por los casos de coronavirus- fueron a definir la eliminatoria a los 12 pasos. El conjunto dirigido en aquel momento por Miguel Ángel Russo se impuso por 4-2 en la tanda de penales, y clasificó a la siguiente fase de la competencia.

LOS OTROS DOS MATA MATA POR PENALES
El primer mata-mata fue el 16 de mayo de 2021, por los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional. El partido se disputó en la Bombonera, y terminó en empate por 1-1. Con goles de Carlos Tevez y Julián Álvarez, el Xeneize y el Millonario -disminuido por los casos de coronavirus- fueron a definir la eliminatoria a los 12 pasos. El conjunto dirigido en aquel momento por Miguel Ángel Russo se impuso por 4-2 en la tanda de penales, y clasificó a la siguiente fase de la competencia.

EL RESTO DE LOS SÚPER
Además de los tres mata-mata, se enfrentaron ocho veces más. Desde que Riquelme volvió al club, se disputaron once superclásicos en total. Boca ganó tres, empataron cinco (ganó los mencionados dos por penales, y River ganó tres. El Xeneize convirtió once goles, y el Millonario doce. Pero contando las series eliminatorias como clasificaciones de Boca, se podría decir que el historial es favorable para el Xeneize.
LA PATERNIDAD COMO JUGADOR
Antes de su salida a mitad de 2014, también es innegable la paternidad como jugador. El ídolo mandó en los números (ganó 14, empató ocho y perdió seis, con 59,52% de efectividad), pero mucho más en lo intangible, en lo que no queda en lo más frío de las estadísticas. Lo eliminó, sí, en la Libertadores 2000. Le hizo goles, sí. Pero por sobre todas las cosas, de tanto que disfrutaba esos partidos, casi siempre la rompió frente a su clásico rival. Fue amo y señor de los superclásicos.

FUENTE: DIARIO OLÉ

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