La noche del 4 de septiembre en la ciudad de Rafaela se vivió un hecho preocupante que ha generado consternación en la comunidad. Varias detonaciones y amenazas tuvieron lugar en dos domicilios diferentes, sin causar heridos, pero dejando daños materiales considerables.
El primer incidente tuvo lugar en la calle Nicasio Oroño al 70, alrededor de las 22:00 horas. Una vecina de 31 años se encontraba afuera de su vivienda sacando la basura cuando avistó a un hombre con un camperón oscuro estacionado en una motocicleta de 110cc de color oscuro. Más tarde, al ingresar a su casa, escuchó tres detonaciones y al salir nuevamente, encontró cuatro vainas en el suelo, evidenciando el uso de armas de fuego en la zona. La policía intervino y secuestró cuatro vainas servidas, tres de calibre .45 y una de calibre 11.25, además de cuatro proyectiles de plomo y esquirlas de plomo en la vereda.
El segundo incidente ocurrió en la calle Iturraspe al 1900, donde un joven de 29 años y su madre se encontraban en su hogar. Ambos escucharon tres disparos seguidos de cinco impactos de bala, dos de los cuales alcanzaron la ventana, uno impactó en la pared bajo la ventana, otro en el soporte superior y uno más en la puerta de la vivienda. Se sospecha que los posibles autores, dos jóvenes conocidos en el ambiente policial, se desplazaban en una motocicleta Honda Wave de color negro. Afortunadamente, no se reportaron heridos en este incidente. La policía tomó medidas para asegurar la zona y secuestró tres vainas servidas de calibre 45, una esquirla y un proyectil del mismo calibre.
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