A partir de las 11 de la mañana del lunes último, en la sala 2 de los tribunales penales de Rafaela, se llevó a cabo una audiencia de procedimiento abreviado, en la causa caratulada como “Castro Marcelo Daniel y Otros, s/ Estafa”, en la que al mencionado imputado Marcelo Castro, de 43 años, se lo condenó a cumplir la pena de 3 años de prisión efectiva, por la megaestafa en perjuicio de las empresas lácteas rafaelinas Las Taperitas S.A., y Suc. de Alfredo Williner S.A.
La audiencia estuvo presidida por el juez de IPP Gustavo Bumaguín, en tanto que por la parte acusatoria quien representó a la Fiscalía Regional 5 Rafaela fue el fiscal Guillermo Loyola, encontrándose presente además el abogado querellante del ex contador de ambas firmas perjudicadas, el Dr. Carlos Farías Demaldé. En tanto que por la defensa técnica del imputado actuó la abogada del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal (SPPDP) Dra. Amalia Cassina.
En su resolución el juez Bumaguín resolvió condenar a Marcelo Daniel Castro a la pena de 3 años de prisión de cumplimiento efectivo y costas del proceso. La pena impuesta vence el 8 de marzo de 2027 en la que el imputado deberá ser puesto en libertad. Pidió además se oficie a la Unidad N° 1 Coronda para que elabore informes respecto de la libertad condicional dentro del plazo de ley.
Cabe recordar que el imputado hace 8 meses que se encuentra detenido con prisión preventiva, y que tiene domicilio en la zona de Lanús Este del Area Metropolitana Buenos Aires (AMBA). Además, en la audiencia imputativa el fiscal Loyola imputó a otras 17 personas, también de la provincia de Buenos Aires, a las que les atribuyó ser partícipes necesarias de los actos delictivos.
Las maniobras provocaron un perjuicio económico de 153.000.000 de pesos a la firma Las Taperitas S.A., y 18.000.000 de pesos a la firma Suc. de Alfredo Williner S.A.
En cuanto a las calificaciones penales de los hechos ilícitos, a Marcelo Daniel Castro se le atribuyeron la coautoría de estafa reiterada en dos oportunidades y acceso ilegítimo a sistema o dato informático, así como el delito de uso de un documento falso, en carácter de autor.
A los restantes 17 imputados se les endilgó la participación necesaria en diferentes hechos de estafa y acceso ilegítimo a sistema o dato informático.
LAS MANIOBRAS
Según dio a conocer oficialmente el Ministerio Público de la Acusación (MPA) luego de la audiencia imputativa y de medidas cautelares realizada el sábado 16 de marzo de este año, el fiscal Guillermo Loyola manifestó que “el martes 23 de enero de este año, el hombre investigado utilizó los datos de identidad de un exempleado de una de las firmas damnificadas y logró de manera engañosa cambiar las claves de acceso a su perfil bancario y modificar así la contraseña del homebanking para obtener la tarjeta de coordenadas de la empresa”.
“Con la utilización de un documento de identidad apócrifo del exempleado de la empresa, el imputado indujo a error a personal de la entidad bancaria y obtuvo de esa manera la tarjeta de coordenadas con la que logró realizar 38 transferencias a distintos destinatarios y por diferentes montos, lo que le causó un perjuicio a la compañía por una cifra aproximada de 153.000.000 de pesos”, afirmó el fiscal.
Loyola añadió que “con la misma tarjeta de coordenadas, el imputado logró ingresar a la cuenta corriente de la otra empresa –relacionada con la primera firma– y, de común acuerdo con otras personas, les transfirió a cada una sumas de dinero por un total aproximado de 18.000.000 de pesos”.
“La mayoría de los destinatarios de las transferencias realizadas por el hombre investigado ya fueron identificados e imputados como partícipes necesarios de las estafas”, agregó.
“Por otra parte, invocando el nombre del exempleado de la empresa damnificada y utilizando el mismo documento de identidad apócrifo y una supuesta autorización para actuar en representación de la empresa, el imputado adquirió a una firma de Buenos Aires 500 amoladoras y 500 taladros, herramientas que abonó mediante transferencia desde la cuenta corriente a la que tenía acceso ilegalmente”, concluyó Loyola sobre las maniobras delictivas desplegadas.