Delfina De Lellis fue la participante que salió en primer lugar del reality show y tuvo un mano a mano en LAM
La eliminación de Delfina De Lellis, quien obtuvo un 58,9% de los votos en la primera gala de expulsión de la presente temporada de Gran Hermano (Telefe), sigue dando tela para cortar. La joven modelo, oriunda de la localidad bonaerense de Tres de Febrero, tuvo un mano a mano con Ángel de Brito en el estudio de LAM (América) y habló de todo. “No se si fue fácil el casting, fui a ser yo y pasé las etapas. Mi familia estaba a favor de que fuera a la casa de Gran Hermano”, comenzó contando.
“Soy la primera eliminada por los comentarios que hice”, aventuró ella a la hora de hablar de su expulsión. “Varios hicieron estos comentarios pero la que quedaba enganchada era yo, o en comentarios de todos me reía. Hay charlas que no me acordaba. Adentro se siente que pasa más tiempo del que pasa en realidad. Y estoy arrepentida de las cosas que dije. No esta bueno verme en ese papel y decir esas cosas”, expresó.
Respecto a una de las sonadas disputas que tuvo en su corta estadía en la casa y de lo que sintió al salir, dijo: “Con Luciana hablé muy bien, nos llevábamos bien, cuando salga quiero hablar con ella. Me río del hate, lo llevo con humor. Y me shockeó tener fandom: tengo gente que me defiende contra el hate. También, ver a Susana (Giménez) fue un flash. Decíamos qué le importa a Susana qué hacemos nosotros, pero fue re loco”.
"Si bien mi mamá dice las cosas buenas que tengo, también me recalca lo malo. Si hago algo mal, me lo dice para que aprenda. Nos pudimos ver, pero no hablamos tanto. Ya no estoy tan angustiada, estaba como en shock. Cuando me quedé en placa con Ulises me la veía venir. Me mentalizaba para no llorar antes adelante de las chicas. Cuando crucé la puerta empecé a llorar, quería ir al piso y no podía parar de llorar. Yo quiero volver”, dijo luego con respecto a la posibilidad de acceder a un repechaje.
Luego, De Brito retomó el tema de su pelea con Luciana y Delfina se defendió. “No va más por la sexualidad si no por como era ella, no se podía abrir. Intentábamos entender su historia y pensar por que no podía lograrlo. Se notaba. Estábamos intentando entenderla un poco para hablarle de algo. Desde el principio fue así, antes de los comentarios que hicimos. A mi no me afectarían tanto esos comentarios. Pero no me gustaría, le preguntaría por qué lo hizo, por eso quiero hablar con Luciana cuando salga. Ya pedí disculpas. No era tanto ella como trans, si no como persona”.
A continuación se explayó sobre su estrategia durante su breve estadía en la casa. “No creo haber hecho un personaje, el mismo grupo te va llevando, si hacés un comentario y te lo festejan te van llevando. Nos fuimos revolucionando entre nosotras. Realmente ahí adentro parece que pasa más tiempo. No pensás en las cámaras, al estar en ese grupo te olvidás y hablás”, expresó.
“En una semana no pude armar bien la estrategia. Mi personaje no era ser mala o buena, era ser yo. Creo que más que nada con Martina y Lourdes sentimos afinidad al instante, no fue tanto por sentirme sola”, reafirmó luego.
“Cuando me vi afuera, vi muchas conversaciones que me había olvidado, no me acordaba, verme de afuera fue impactante. Y eso me sirvió para decirme no esta bueno verme en ese rol para el futuro. A mi grupo le diría que baje un cambio. A mi me hacían bulliyng porque en secundaria sufría ataques de ansiedad, hacían apuestas, Lo superé en terapia”, contó sobre su pasado desconocido.
Por último, de Brito le preguntó cuáles son sus favoritos para ganar el juego. “Brian me gustaría, por el tema de sus hijos. Siento que estaría bueno que como sociedad le demos esa oportunidad. Que no lo saquen o que dure más tiempo, porque él entró con el motivo de darle una mejor vida a sus hijos, que pueda terminar la casa que está haciendo. Y de las chicas, Sandra, porque es una muy buena jugadora, es muy inteligente, es auténtica, es como es”, respondió.
FUENTE; INFOBAE