Jorge Martín Almoguera (San Sebastián de los Reyes, Madrid, 26 años) es por fin campeón del mundo de MotoGP. Sin pasar grandes apuros, con una tercera plaza en el GP Solidario de Barcelona este domingo, el piloto español remató la faena y culminó su mejor temporada y mucho más que eso: el sueño de toda una vida dedicada a las dos ruedas. El suyo y el de toda una familia. Allí estaban sus padres, Ángel y Susana, en primera línea, emocionados ante la consecución del título que justifica todo el sufrimiento, tanto el económico como el físico. También su hermano, Javier, y su pareja, María, inseparables dentro y fuera de los circuitos.
Martín solventó con entereza la carrera más tensa de su vida, cruzando a más de dos segundos de su gran rival por el título y ganador de la prueba. El español salió fuerte y decidido, colocándose a la estela de Bagnaia en la primera curva después de partir cuarto. Marc Márquez se vio más fuerte todavía y le metió la moto en la segunda vuelta, a final de recta. El madrileño le dejó pasar sin meterse en líos innecesarios. De allí en adelante, pudo rodar solo y sin sentir la presión acuciante de otros rivales. Su amigo Aleix Espargaró, en su despedida, luchó a cuchillo con Enea Bastianini por la cuarta plaza y ejerció de guardaespaldas del flamante campeón hasta la bandera de cuadros.
Pablo Morano (REUTER