Las ofertas de licitación se abrirán el 20 de diciembre.
El esperado proyecto para construir un nuevo puente que conecte las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé dará un paso decisivo el próximo 20 de diciembre, cuando se abrirán las ofertas de licitación. Según anunció el ministro de Obras Públicas, Lisandro Enrico, el evento está programado para las 20 horas y se revelará el presupuesto final la semana próxima. Enrico explicó que ya se han realizado rondas de revisión del anteproyecto, anticipando un puente que complementará el actual, ofreciendo un carril en cada dirección.
“El nuevo puente se ubicará a la izquierda del actual, en dirección hacia Santo Tomé, en el lado del bañado”, explicó Enrico. Este diseño busca optimizar el tránsito en ambos sentidos, mejorando la conexión entre ambas ciudades y evitando los habituales embotellamientos. Sin embargo, el proyecto requiere la expropiación de algunos terrenos y una vivienda en Santo Tomé. "Estamos en contacto con los propietarios para llegar a un acuerdo que evite la expropiación forzosa, priorizando un acuerdo de indemnización", indicó el ministro, destacando la necesidad de estos espacios para la reordenación urbana.
En cuanto a la propiedad del puente, Enrico aclaró que, aunque será financiado por la provincia, la estructura será cedida a la Nación para incorporarse a la Ruta Nacional 11. “Los santafesinos vamos a construir este puente, y luego será la Nación quien se ocupe del mantenimiento”, agregó.
Proyección y detalles técnicos
La obra, con un plazo de ejecución de dos años, implica intervenciones en tres zonas clave: el lado santafesino, el lado urbano de Santo Tomé, y el propio viaducto sobre el río Salado. El puente contará con 1.300 metros de extensión y estará sustentado por 42 pilotes de entre un metro y un metro veinte de diámetro. “Además, se instalarán ciclovías en ambos lados del puente, una decisión que responde al creciente uso de bicicletas en la región”, destacó Enrico.
El ministro también señaló que Santa Fe ha logrado mantener costos de obra controlados, lo que ha incentivado la competencia entre empresas constructoras, aumentando las propuestas y mejorando los precios.
FUENTE: SIN MORDAZA
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